La caída de un dictador, la muerte de un salvador….las dos caras de una misma moneda. El tiempo y la historia juzgara a uno de los personajes que nos guste o no fue muy relevante para Chilenos y marco una pagina negra e imborrable en nuestra historia.
Y ahora que ??? Seguiremos divididos, cual será nuestra excusa para olvidar y aprender de los errores, pensar en una reconciliación histórica…, la muerte no basta, o al menos todavía no, quedaron deudas e injusticias que ya no se podrán reparar ni llegar a una respuesta, los eternos jueces del purgatorio sabrán que hay que hacer, que puerta abrir o cerrar, las leyes divinas deberán hacer justicia y consolar las victimas de ambas partes, derecha e izquierda, izquierda y derecha en todas direcciones.

Y ahora que pasara con ese cántico; “el que no salta es pinochet, el que no salta es pinochet, el que no salta es pinochet ”, debo reconocer que tengo sentimientos encontrados tras su muerte, pero poniendo en la balanza los pro y los con tras, nada que decir, no existe justificación alguna para tal macabros asesinatos y abusos a los derechos humanos.
La moraleja de esta historia es que no hay moraleja, lo bueno y lo malo siempre están presentes en el ser humano, la ambición y el poder es cuento repetido y siempre recurrente, e inevitablemente tropezaremos siempre con la misma piedra aunque el camino sea conocido. Ahora solo nos queda tratar de lavar la historia con algún detergente suave y agua fria…